
La escena es casi igual en varios sectores del país: se está construyendo un edificio y al lado, hay cientos de motocicletas estacionadas. Estos vehículos son la forma más conveniente de transporte, escogida por los trabajadores.
Esa estampa cambia por completo el 3 de mayo.
El llamado Día de la Cruz de Cristo es la fecha cuando los trabajadores de la construcción católicos, celebran la bendición de tener trabajo, así como protección durante las riesgosas tareas que realizan.
El 3 de mayo del año 326, durante su peregrinación a Jerusalén, Santa Elena encontró la verdadera cruz donde fue crucificado Jesucristo. Ese hallazgo tiene especial importancia para la grey católica y, especialmente, para los albañiles.
Las obras en construcción se adornan con cruces, papeles de china y distintos altares como elementos de contexto a ese día especial, siendo una manera de festejar la resurrección de Cristo.
Si bien es un agradecimiento a su amparo, ante los riesgos propios de su trabajo, los albañiles también expresan su esperanza en evitarlos los posibles incidentes y accidentes en el tiempo siguiente. Es decir, es una muestra de gratitud por el pasado, al tiempo de implorar por el futuro.
Suzuki se une a la celebración de los motoristas católicos dedicados al sector construcción, solicitándoles que a nivel terrenal pongan atención cuando van y cuando regresan del trabajo, así como cuando utilizan sus motos para hacer viajes propios de la familia.
Surgida de una frase griega de origen politeísta, en todo el mundo se conoce la frase: “Ayúdate que yo te ayudaré”, con la cual se llama a la consciencia de protegerse para gozar de la protección divina, aplica perfectamente todos los días en quienes manejan una moto Suzuki.
Por eso, celebramos juntos y, al mismo tiempo, llamamos a la introspección para celebrar ese día especial y prosperar sanamente durante todo el año.