Para analizar cuál gasolina usar, debemos ir al principio: el combustible tiene energía que liberará a través del motor para convertirla en movimiento y calor. Cada materia tiene su propio poder calorífico: el agua tiene uno distinto al de la gasolina, la harina tiene otro distinto a la pólvora… y así cada tiene esa capacidad.
La gasolina tiene un alto valor, por eso es utilizada como combustible. Para quemarse se requiere elevarle la temperatura y la presión, para luego exponerla a una chispa. Eso lo hace el cilindro de la moto.
Al comprimirla dentro del cilindro, se eleva su temperatura y podría auto quemarse, para lo cual se le agregan aditivos para que mantenga su octanaje. Si se el motor está hecho para comprimir en un baja relación, deberá utilizar una gasolina 87 RON, conocida como Regular. Esto se aprecia cuando en el manual del usuario dice: Relación de Compresión: 10:1 o bien, 9:1, que se lee: “diez a uno” y “nueve a uno”, respectivamente.
Si en el manual de propietario dice: Relación de Compresión de 11:1 o 12:1, eso quiere decir que tiene una alta compresión y deberá usar una gasolina 95 RON, conocida como Súper.
Lo que determinará cuál de los 2 tipos de gasolina a usar será la Relación de Compresión. No existe ninguna otra razón para utilizar una u otra gasolina.
De esa forma, no se gana absolutamente nada al usar una gasolina de mayor precio por galón, si nuestra moto tiene un motor cuya compresión indica usar gasolina regular.
Técnicamente, una gasolina Súper no dará más kilometraje al usarla en un motor que está construido para usar Regular.
Así que, para que su motor sea económico, dure mucho y le dé el desempeño según su fabricación, use la gasolina que se indique en el manual del propietario.